La basílica de San Pedro

La basílica de San Pedro

El mayor templo de Roma y el más venerado por los católicos es la basílica de San pedro. La construcción de la basílica empezó en tiempo de Julio ll. En el año 1506 y duró mas de 176 años. Solo el edificio principal costó más de 50 millones de pesos en oro.

El templo de San Pedro no tiene rival por el esplendor de sus mármoles, estatuas y pinturas y por la riqueza de su ornamentación. En Joyas y materiales preciosos.

Para la constricción de esta grandiosa basílica se aprovecharon en parte los mármoles de las antiguas ruinas. Y estas fueron así destruidas perdiendo la historia grandes documentos que favorecían a su estudio. Sea como fuere, la iglesia de San Pedro en Roma, es la más valiosa obra del orbe, la tardó que más en construirse y la de más costoso mantenimiento.

Los grandes tesoros destruidos para dejar sitio a la basílica

La actual basílica ocupa el lugar de una iglesia anterior que era riquísima en obras de arte. Reunidas a costa de mucho tiempo y trabajo y que fueron destruidas. Bien por la inadvertencia o deliberadamente, cuando aquella fue demolida. Este descuido es imperdonable en Julio II, que ordenó la destrucción de la antigua iglesia para hacer sitio a la nueva.

Bramante puso los cimientos de la basílica de San Pedro

En aquella época surgieron artistas maravillosos, gigantes de la escultura y de la pintura. Entre ellos Donato Bramante, que nació en Urbino y murió en Milán donde aprendió geometría y perspectiva. Ciencias que en aquellos tiempos no eran comprendidas ni aun por los mejores artistas.

Bramante era uno de los mejores pintores de su tiempo, pero abandonó los pinceles, por el lápiz y el compás del arquitecto.  Fue llamado a Roma por Alejandro VI y en tiempo de Julio II edificó grandes galerías en el Vaticano. Además, trazó y echo los cimientos de la basílica de San Pedro. Su idea era levantarla en forma de cruz griega con una gigantesca cúpula en el centro, pero murió a los 8 años de haber comenzado los trabajos.

 

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